Por el mismo camino no vamos a ningún lado

La nueva legislatura se va poniendo en marcha. Unas elecciones generales se avecinan. La posibilidad de una nueva recesión de la economía mundial se hace cada vez más evidente. Más hay algo que no cambia: las políticas del Partido Popular.

El reciente conflicto que está teniendo el Gobierno de la Comunidad de Madrid con la Educación Pública es una clara muestra de ello. Por mucho que el PP se escude en el déficit y en el ahorro, lo que es evidente -y que no quieren sacar a la luz- es la guerra abierta contra lo público. Es una confrontación clara contra el sistema de Educación Pública en pro del sistema privado-concertado.

La semana pasada compareció el Vicepresidente y portavoz del Gobierno, Ignacio González para mostrarnos cuáles van a ser las líneas de actuación del Partido Popular en materia económica. Con cierta desazón -por lo repetitivo- pudimos comprobar que el mitin era el mismo: vamos a privatizar -porque es lo bueno y lo que quiere la gente- y de todo lo demás la culpa la tiene Zapatero -porque es "mu" malo-.


Viendo lo visto, y oído lo poco que aporta el PP a una política con mayúsculas, voy a centrarme en lo que fue mi intervención, y en lo que para Izquierda Unida suponen las maniobras del Partido Popular de la Comunidad de Madrid.


Como he comentado anteriormente, el eje principal del PP es mantener abierto el frente contra lo público: recortes brutales y privatizaciones de todo lo que se mueve. Desde la Puerta del Sol no se elaboran políticas para todos y todas las madrileñas. Se deja de lado a la inmensa mayoría para beneficiar a unos pocos.


Se practican políticas que han generado, y generarán, paro, precariedad laboral, ruptura social, absoluto desmembramiento del Estado del Bienestar -si es que existe-, cerrojazo de empresas, economía sumergida y fraude fiscal, deterioro de los servicios públicos y proliferación de las privatizaciones.


A todo esto tenemos que unirle la joya de la corona -de la lideresa o no, eso veánlo ustedes-: la política fiscal basada en regalos fiscales a las rentas más altas. Fiscalidad que regala a unos pocos propiciando recortes para los demás. Sin ir más lejos, el recorte en la educación pública es menor que lo que se deja de ingresar la Comunidad de Madrid por las exenciones que se hacen a las familias que acuden a la educación privada. Si alguien lo entiende, que me lo cuente.


El señor González -leáse la mano derecha de la Lideresa- se empeñó en denostar nuestro análisis y en decir que su modelo funciona perfectamente. Nos llama "carcas", dice que su modelo es moderno. Si una Comunidad moderna, tiene que tener un índice altísimo de paro, ruptura social, desahucios cada dos por tres, privatizaciones por doquier y el fantasma de la Gürtel recorriendo los pasillos de Génova, yo prefiero ser un "carca". Y a mucha honra.


No supo explicarme el señor Vicepresidente porqué no se invierte más en I+D+i -hablando de modernidades-, porqué se cerró el IMADE, porqué se ha prescindido del Servicio Regional de Empleo, o MINTRA.


Tampoco me explicó en que consiste esa propuesta veraniega que mencionaba "las competencias duplicadas entre Ayuntamientos y Comunidad de Madrid para mejorar la eficiencia en la prestación de servicios". A mí, a IU-Los Verdes, eso no nos huele ni medio bien, y mucho menos viniendo de quien viene. Nosotras y nosotros somos municipalistas. Consideramos a los Ayuntamientos las Administraciones más cercanas al Ciudadano y por eso mismo deben ser dotadas de medios para solventar y solucionar los problemas de la ciudadanía, a la vez de transformarlos en generadores de políticas activas para sus municipios.


La cuestión de la privatización del Canal de Isabel II también se quedó en un enigma. No explicó porqué una empresa rentable, un servicio absolutamente indispensable para la Comunidad de Madrid, está a las puertas de la privatización total. 


En cuanto a Telemadrid, que decir. Mucho me temo que va a seguir siendo la cocina del ideario del Partido Popular. Una televisión sectaria, que obvia la realidad de la Región y que en definitiva -y como casi todo- pertenece a unos pocos.


Así hemos empezado. En realidad parece que nunca acabamos. El PP va a mantener su dirección antisocial. 


Desde Izquierda Unida Los Verdes no nos vamos a quedar callados, eso que lo tengan muy en cuenta. Que por mucha mayoría absoluta que se gasten, no son los dueños de nadie. Nosotras y nosotros también estamos aquí. Y vamos a dar la pelea.